Bruselas, 7 de junio de 2021

La Comisión Europea ha iniciado hoy una consulta pública específica en la que se invita a todas las partes interesadas a presentar observaciones sobre la propuesta de revisión de las Directrices de la UE sobre ayudas estatales en materia de protección del medio ambiente y energía. Para tener en cuenta la creciente importancia de la protección del clima, las directrices revisadas se denominarán Directrices sobre ayudas estatales en materia de clima, energía y medio ambiente. Las Directrices propuestas también comprenden normas de compatibilidad en ámbitos emblemáticos como las infraestructuras de movilidad limpia y la biodiversidad, sin olvidar la eficiencia en el uso de los recursos en apoyo de la transición hacia una economía circular. Las partes interesadas podrán responder a la consulta durante ocho semanas, hasta el 2 de agosto de 2021.

La vicepresidenta ejecutiva Margrethe Vestager, responsable de la política de competencia, ha declarado: «Para sostener la transición ecológica, Europa necesitará una cantidad considerable de inversiones sostenibles. Aunque una gran parte procederá del sector privado, las ayudas públicas contribuirán a garantizar que la transición ecológica se produzca con rapidez. Por eso queremos asegurarnos de que nuestras normas sobre ayudas estatales en materia de clima, energía y medio ambiente estén listas para la transición ecológica. Las normas revisadas facilitarán a los Estados miembros alcanzar los ambiciosos objetivos del Pacto Verde Europeo, manteniendo en un mínimo las posibles distorsiones de la competencia. Ahora invitamos a todas las partes interesadas a dar a conocer su opinión».

Las Directrices sobre ayudas estatales en materia de energía y medio ambiente permiten a los Estados miembros apoyar proyectos de protección del medio ambiente (por ejemplo, protección del clima y generación de energía verde) y medidas para garantizar la adecuación de la generación de energía, bajo determinadas condiciones. Las Directrices tienen como finalidad ayudar a los Estados miembros a alcanzar los ambiciosos objetivos de la UE en materia de energía y clima con el mínimo coste posible para el contribuyente y sin falseamientos indebidos de la competencia en el mercado único.

La Comisión ha efectuado una evaluación de las actuales Directivas en el marco del control de adecuación de las ayudas estatales. La evaluación pone de manifiesto que las actuales disposiciones de las Directrices funcionan correctamente, se ajustan en general a su propósito y constituyen una herramienta eficaz a la hora de apoyar la consecución de los objetivos medioambientales y climáticos de la UE, limitando al mismo tiempo las distorsiones indebidas en el mercado único.

Al mismo tiempo, la evaluación indica que podrían ser necesarios algunos ajustes específicos, tales como la simplificación y actualización de determinadas disposiciones y la ampliación del ámbito de aplicación de las Directrices a nuevos temas, por ejemplo, la movilidad limpia y la descarbonización. Además, la evaluación señala que las normas actuales pueden tener que ajustarse a las prioridades estratégicas de la Comisión, especialmente las del Pacto Verde Europeo, y a otros cambios normativos recientes en los ámbitos de la energía y el medio ambiente.

A este respecto, la Comisión propone varias modificaciones de las normas actuales, sobre todo para lo siguiente:

El proyecto de Directrices y toda la información sobre la consulta pública, incluidos más datos sobre los cambios propuestos, se pueden consultar en línea.

Próximas medidas

Además de la consulta de las partes interesadas que se inicia hoy, el borrador de Directrices sobre ayudas estatales en materia de clima, energía y medio ambiente también se debatirá en una reunión entre la Comisión y los Estados miembros que se celebrará hacia el final del período de consulta. Este proceso garantizará que los Estados miembros y las partes interesadas tengan oportunidades suficientes de presentar observaciones al proyecto de propuesta de la Comisión.

La adopción de las nuevas Directrices está prevista para finales de 2021.

Contexto

Las actuales Directrices sobre ayudas estatales en materia de protección del medio ambiente y energía establecen las condiciones en las que las ayudas estatales en esa materia pueden considerarse compatibles con el mercado interior. En particular, las Directrices promueven una transición gradual hacia un apoyo a las energías renovables basado en el mercado e introducen ayudas a la infraestructura energética y a la capacidad de generación para reforzar el mercado interior y garantizar la seguridad del suministro. Además, establecen criterios sobre la manera en que los Estados miembros pueden eximir a las empresas de elevado consumo energético de las tasas cobradas para prestar apoyo a las energías renovables.

Las disposiciones de las Directrices se completan con el Reglamento General de Exención por Categorías (RGEC), que fija una serie de condiciones de compatibilidad ex ante sobre cuya base los Estados miembros pueden aplicar medidas de ayuda estatal sin notificarlas previamente a la Comisión. El RGEC está siendo objeto actualmente de una revisión parcial y se prevé que en el verano de 2021 se lleve a cabo una consulta pública sobre la propuesta de tales disposiciones revisadas.

La revisión de las Directrices se basa en la evaluación y en diversas fuentes de datos y pruebas, tales como práctica casuística, un estudio externo y aportaciones de las partes interesadas. La Comisión ha recabado opiniones a través de una consulta pública abierta llevada a cabo en 2020. En otoño de 2020, la Comisión también puso en marcha un debate europeo sobre la manera en que la política de competencia puede seguir apoyando los objetivos del Pacto Verde Europeo, con vistas a velar por que las normas en materia de competencia y las políticas de sostenibilidad coadyuven de la mejor manera posible. El proceso comenzó con una convocatoria de contribuciones, tras la cual se celebró una conferencia organizada por la vicepresidenta ejecutiva Margrethe Vestager en febrero de 2021. Las más de doscientas contribuciones recibidas también se han aprovechado de cara al proyecto de revisión de las Directrices.

Esto se complementará con las observaciones recibidas a través de esta consulta pública.